Ciudad de México, 9 de octubre del 2023.- El presidente Andrés Manuel López Obrador ha anunciado recientemente su propuesta para nombrar a Héctor Enrique Vasconcelos y Cruz como el próximo embajador de México ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), en sustitución de Juan Ramón de la Fuente, cuyo periodo acaba de concluir.
Vasconcelos no es un nombre nuevo en el mundo diplomático. De hecho, su legado está profundamente arraigado en la historia política y cultural de México. Es hijo del icónico político y escritor José Vasconcelos y de la distinguida pianista Esperanza Cruz. Este linaje y su crianza en un ambiente rico en debate, conciencia y apertura de ideas le han conferido una perspectiva única sobre el panorama político y social tanto de México como del escenario global.
El diplomático nació el 14 de febrero de 1945 en la Ciudad de México y, desde joven, estuvo inmerso en una formación académica de élite. Vasconcelos es licenciado en Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales por la Universidad de Harvard, ostenta una maestría en Historia Política de la Universidad de Cambridge y ha avanzado en estudios doctorales en la prestigiosa Universidad de Oxford.
Su trayectoria académica no termina ahí. Ha impartido su conocimiento como profesor en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y ha ocupado cargos destacados como director general del Festival Internacional Cervantino. En su carrera política y diplomática, ha representado a México como embajador en países nórdicos tales como Dinamarca, Noruega e Islandia.
Desde septiembre de 2018, el respetado diplomático ha ejercido como senador de México y ha liderado la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado. Es también miembro fundador del Movimiento Regeneración Nacional.
El mandato del presidente López Obrador para Vasconcelos en la ONU es claro y audaz: llevar la voz de México solicitando a la organización mundial que intensifique sus esfuerzos para prevenir conflictos y que trascienda su rol burocrático para materializar acciones más decisivas y concretas.
