CDMX a 17 de enero, 2024.- El reciente colapso de una estructura en la construcción del Tren Interurbano México-Toluca ha encendido las alarmas en la opinión pública y en el ámbito político. La caída de una dovela, que no resultó en heridos pero sí en daños materiales, ha generado un torbellino mediático en plena temporada electoral. El presidente Andrés Manuel López Obrador ha señalado una campaña en contra de su gobierno, acusando a los medios de adoptar un tono amarillista y sensacionalista ante el suceso.
El Tren Interurbano, conocido como ‘El Insurgente’, es una obra emblemática que comenzó hace más de nueve años y ha estado plagada de complicaciones. Este último incidente, que involucró la caída de una pesada estructura de concreto y el aplastamiento de algunos vehículos, tuvo lugar en la alcaldía Álvaro Obregón, cerca de la terminal Observatorio.
A pesar de la magnitud del evento, no se reportaron heridos, aunque sí daños a un taxi y una camioneta.
El presidente López Obrador ha enfatizado que, a pesar de la cobertura mediática, no se debe perder de vista que el accidente no dejó víctimas y ha comparado la situación con incidentes pasados en obras de gran envergadura. Sin embargo, la oposición y algunos periodistas han condenado los hechos, sugiriendo que reflejan una gestión deficiente en la supervisión de las obras.
